Despiden a María Mátuz con ceremonia tradicional yaqui

CIUDAD OBREGÓN, SON.31 07 2012
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Con una ceremonia tradicional María Mátuz fue despedida por la Tribu Yaqui, reconociéndole los pobladores el gran legado que deja como curandera excepcional e inigualable.

María es el nombre con el que se le conoció más allá de las fronteras mexicanas, Mónica Modesta Mátuz Tadeo es el nombre que aparece en la cruz, donde descansan sus restos en el panteón de Casas Blancas en Vícam.

Su cuerpo reposa con vestimenta blanca con flores de colores sobre su parte inferior, la detienen un conjunto de varas, mientras los rezos se oyen en la iglesia.

También era cantora de la iglesia
Además de ser curandera, era cantora de la Iglesia, aunque los últimos años dejó de asistir al recinto, las misas las hacía en casa con su familia.

"Ella nos enseñó una oración que es muy fuerte, que ella nada más conocía y las nietas que estábamos apegadas, mi mamá y mis primas", reveló Araceli Vázquez Valdez nieta de María Mátuz.

La familia de la afamada curandera de acuerdo al ritual Yaqui no debe ver de frente el cuerpo, sino hacia donde se ubica el Sol.

"La familia se siente muy triste, era una mamá para todas las nietas, siempre estuvo al pendiente de todos, siempre estuvo curando", destacó.

Heredó sus conocimientos
Sus conocimientos han sido heredados a sus familias, pero su energía, dijo, aún no se ha dejado sentir y que en testimonios han trascendido su fama.

Leo Dán, Laura Flores, Joan Sebastian, son algunos de los artistas que la visitaron, así como reporteros del Sur del País y políticos
"Era un pan de Dios, tenía su carácter, no era perfecta, era cariñosa y se enojaba cuando tenía razón", explicó su nieta.

A María Mátuz le sobreviven sus hermanos Martín y Alonso, una de sus hijas, nietos, bisnietos y tataranietos.